lunes, 17 de octubre de 2011
martes, 19 de abril de 2011
noche vacía
Recién llego de una salida con amigos de amigas... una noche que sirvió para que volviera corriendo a mi casa. Algunas frases que me revuelven el estomago como "es un zurdo", "porque no me dejan entrar si yo tengo mas plata que ellos", "el celeste no combina con el blanco", "a estos habría que prohibirles la entrada"...y muchas otras que trataba de no escuchar. En un momento, veo a una de mis amigas haciendo señas de silencio y señalándome, como avisando que yo no pensaba así.
Es difícil describir la sensación que me produce ver a un par de chicos -no tan chicos- creer que son mejores que otros porque tienen un auto mas caro o una remera mas linda. Una posición, que en este caso por cierto, tienen por el único hecho de haber nacido donde nacieron y no en otro lado, sin merito alguno.
Me considero una persona sociable, pero no pude cruzar una palabra con ninguno (los que me conocen sabrán que eso en mi es casi imposible).
Creo que cada quien es libre de ser como se le antoje, pero por mas que sé que existe gente así, siempre me vuelven a sorprender.
No trataría de hacerles cambiar ni mucho menos, ni me complico evaluando cual es la forma correcta de pensar, si es que hay una.
No me sentí mejor sino distinta, como de otro planeta.... me dieron una especie de lástima y vergüenza ajena, los vi como tres cuerpos humanos desperdiciados ahí. Gente a la que la vida (o lo que yo considero que es vida) les pasa por al lado y no los toca.
Cuanta mas gente así conozco, mas me gusta mi planeta.
miércoles, 1 de septiembre de 2010
confianza
Nunca ha quedado lugar en mi vida para los traidores, para los indecisos, para los que no van ni vienen o para los que van y vienen.
Así soy yo, blanco o negro, mar o montaña.
Afortunadamente, puedo cerrar los ojos y dejarme caer de espaldas en los brazos de cada uno de aquellos a los que elegí como amigos y que también me eligieron a mi... cuanta mas gente conozco, mas los quiero y los extraño.
viernes, 2 de julio de 2010
Tenía una pena que a pesar de su esfuerzo logró torcerle los extremos exteriores de los ojos bajándole definitivamente la mirada.
Al respirar, el aire se tornaba espeso, obligándola a inspirar con mas fuerza y contenerlo dentro de si. De vez en cuando lo soltaba de un solo soplido.
Su cabello despeinado, el maquillaje corrido, la mirada opaca.
Sus piernas y manos pálidas temblaban frágiles.
No recordaba el día en que sonrió por última vez.
Había perdido la gracia, el brillo, la magia.
No había esperado a aquellos que quisieron alejarse de su lado.
Aquel día soltó al viento su última y única esperanza.
A penas pudo levantarse para ver por la ventana las hojas caer, pero esta vez no lograron conmoverla.
No sintió frío, ni calor, estaba ausente de si misma.
Se miro al espejo pero al no poder reconocer su rostro lo arrojó al suelo rompiéndolo en pedazos.
Se dejó caer y tendida en el piso soltó un llanto débil como susurro.
Tomó un trozo del espejo, lo apoyó sobre su cuello, cerró los ojos y apagó su luz.
lunes, 22 de febrero de 2010
María Emilia I
Esa vez me habían pasado al local 29 de la galería, María Emilia trabajaba en el 33.
Es difícil describirla, si pienso en la primera vez que la vi, era una señora mayor, elegante. A pesar del frío, se notaba a simple vista que tenía buen gusto para vestir y un frondoso y correcto vocabulario.
Sabía que hacía una semana había cumplido años y había hecho una fiesta en su casa. No me invitó porque a penas nos saludábamos cuando nos cruzábamos de frente por los pasillos, pero había escuchado que cumplía 65 años. Parecía de esa edad. Su rostro y su voz estaban arrugados.
Habían pasado las primeras dos semanas cuando entró en mi local diciendo "yo soy María Emilia", sonrió pícara y me preguntó todos los precios de la vidriera. Pensé que, por su edad, no veía bien los carteles, después me di cuenta que estaba jugando conmigo; pero hasta entonces para mí era una señora mayor, y sólo por eso le debía respeto. Traté de ser simpática y contesté con paciencia. Luego sacó un billete de 100 pesos del bolsillo y me pidió cambio.
Cuando abrí la caja registradora se acercó al mostrador. Traía puestas unas botas de cuero marrones con una franja de piel mas clara en el extremo superior de la caña, pantalones marrones, y un hermoso sweter color marfil bordado con unas pequeñas hojas verdes alrededor del cuello.
Me entregó el billete, tomó el dinero de mi mano y fue ahí cuando vi que las hojas verdes bordadas eran hojas de marihuana.
Sentí pena por ella, era una mujer mayor y alguien le había jugado una mala pasada. Me imaginé toda la situación, pensé que algún vendedor inescrupuloso le había vendido el sweter a esta pobre mujer, pensé que quizá ella había comprado sin saber, pensé en decirle, luego en no decirle.
Tomo el dinero, se dio vuelta y caminó unos pasos cuando arrojada por un impulso le dije:
-María Emilia! Disculpe el atrevimiento, esto es raro... (balbuceando, volví a dudar, luego tomé aire y mas decidida terminé la frase) mire creo que es mejor decirle, yo se que usted es una señora mayor, elegante...¿sabe que son esas hojas que lleva bordadas en el sweter?
De espaldas giró sólo media vuelta su cabeza hacia la izquierda, mirando hacia el costado y con media sonrisa dibujada me contestó:
- Es "Cannabis"... te parece raro? Raro era en mi época! -concluyó-
Soltó una carcajada burlona y se fue.
Ese día y así, conocí a María Emilia.
lunes, 28 de diciembre de 2009
Plegaria conjuro
Me resulta difícil y hasta gracioso ponerle un nombre, no se bien que o quien es, tampoco la mayoría de nosotros, ni siquiera sabemos si existe.
Nunca tuve problemas de religión, porque adopté para mí todas las religiones y creencias. Aunque suene un poco raro, al igual que cuando elegí mi carrera, el dilema no era que no me gustara ninguna, sino que me gustaban todas, con esto es igual. ¿quien tendrá la verdad?
Así fue que sin practicar mucho ninguna, decidí creer en todas, por las dudas, sin ofender a ninguno de los dioses o profetas mandé ese mail al infinito y el resulado fue increíble: de los 24 deseos que pedí, se cumplieron 23, y ese que quedó pendiente está en camino.
Hay algo que sí es claro, absolutamente todas las religiones hablan de fe, y que es la fe sino creer CIEGAMENTE?, opino que algo de razón tienen, y la experiencia me lo ha demostrado.
Los mayores méritos de mi vida se lograron "a pura fe", fe en mi, fe en dios, fe en San expedito, fe en mis medias color rosa para los exámenes, fe en Buda, fe en los libros plagiados de Bucay, fe en las velas que prendió mi abuela, fe en que si cruzaba los dedos y decía "san roque san roque que este perro no me mire ni me toque" el perro no me mordía, fe en que todo vuelve, fe en la fe...
Cuando nadie creía yo creí. Si tengo que ser objetiva, les aseguro que no tenía muchas posibilidades y sin embargo hasta hoy con mas o menos esfuerzo logré casi todo lo que me propuse en la vida.
Volviendo al tema de la plegaria, no se porque será que se cumplió, yo se lo atribuí a mi fe, aunque en realidad bien podría ser que tanta gente como ustedes, es decir tantas buenas vibras, leyendo mis deseos, quizá hicieron que esta plegaria se vuelva mas y mas fuerte y por eso todo lo que pedí se cumplió.
También podría ser (y porque no?) que MI BLOG TRAE SUERTE, al mejor estilo Legranesco o que yo sea algo así como una especie de "Aladina".
Cualquiera sea el motivo, quería compartirlo con ustedes, aquí va mi plegaria para el 2010, igualita que la del año pasado, sólo que repitiendo aquello que quiero repetir y agregando nuevos deseos.
Al final, les dejo el espacio en el icono "comentarios" para que agreguen sus propios deseos y quien sabe, si en este nuevo año se nos cumplen a todos. Yo creo que sí!
Cuando una idea entra en tu cabeza ya está en este mundo, si empujamos entre todos tiene que salir.
Estimado(..dios, universo, cristo, ala, mahoma, buda, energía, o como prefieras) tengo tanto para agradecer por el año que paso… tanto que me da vergüenza pedirte... aún así…en este nuevo año...
…quisiera disfrutar más de todos los atardeceres…
...quisiera trabajar un poco menos y ganar cada vez mas...
…quisiera escuchar más música y cantar más fuerte aunque mis nuevas vecinas se quejen…
...quisiera ver mas seguido a mis amigos y hacer amigos nuevos, eso sí, tan buenos como los que hoy tengo...
...quisiera que mi hermana se cure para siempre...
...quisiera viajar mucho mas...
...quisiera poder disfrutar mas de la naturaleza y del mar ...
…quisiera que pongamos ese negocio y que nos vaya bien…
…quisiera caminar mas tiempo descalza…
...quisiera ser menos celosa (mm a ver..eso incluiría algunos cambios como por ej: que mi novio deje de agregar desconocidas al facebook y borre algunas viejas conocidas)...
…quisiera que mi enredadera crezca mas rápido y tape toda la pared…
...quisiera que mis abuelos vivan muchos mas años...
…quisiera dormir mas los días de lluvia…
...quisiera recibir mas abrazos...
...quisiera tomar mas mate y menos café...
...quisiera comer mas chocolates con almendras y frutillas con crema...
…quisiera seguir siendo tan libre y más...
…quisiera sonreír más y seguir tentándome de risa al menos una vez a la semana…
…quisiera seguir siendo tan feliz y más...
...quisiera esas dos cosas que sabes que quiero mucho mucho pero que no puedo escribir porque tienen que ver con alguien que va a leer esto y me da vergüenza que se entere...
…quisiera conservar la capacidad de elegir y distinguir lo importante de lo efímero, lo bueno de lo malo, lo dulce de lo amargo, sumar más y restar menos...
...quisiera que se cumplan todos los deseos que agreguen quienes lean esta plegaria a continuación...
Por último, …Quisiera una vez mas…agradecerte tanta felicidad, tanto amor, a mi amor y tanta vida!!!.-
lunes, 2 de noviembre de 2009
Casuales Causalidades..
Sería una especie de casualidad tras otra que me hace dudar acerca de mi propia existencia y la del mundo que me rodea.
He visto en muchas películas y programas de TV -desde “Volver al futuro” hasta “los Simpsons-, como se presenta esa loca y no tan loca idea de que, cambiando algo mínimo del pasado, se modificaría el futuro. No importa si el resultado es que lluevan rosquillas o si la madre termina enamorada del hijo, el tema es...
Se detuvieron a pensarlo alguna vez???
Yo hoy, justo ahora y está ahí dando vueltas en mi cabeza... todo parece tener un sentido.
Si esa amiga no me hubiera presentado casualmente a esa otra que luego fue mi amiga también y se mudó ese mismo mes a esa ciudad a la que luego de un año también me mudé porque conocí a ese chico que vivía en esa misma ciudad, donde ella me recomendaría en este nuevo trabajo al que siempre quise llegar y nunca hubiera podido sin su ayuda.
Y si no hubiera aparecido una hora más tarde a esa cita en la que ese que me hacía sufrir tanto me dejo plantada una vez más, o lo dejé yo no recuerdo, pero lo cierto es que esa noche, en ese lugar, estaba este que hoy me hace tan feliz.
Lo pienso, lo repaso una, otra vez y me pregunto: Será que todo lo que nos pasa, nuestra vida tal como se compone es una compleja serie de casualidades encadenadas unas con otras, y al mismo tiempo, con las de otras personas en las que no son o somos mas que medios para que lleguen o lleguemos a fines que probablemente no nos incumben? Será cierto que existe un destino o un dios que dispone y acerca cada instrumento, cada ser, cada momento hasta nosotros sólo para que podamos cumplir y llevar adelante algo que se escribió antes??
CUAL ES LA VERDAD? CASUALIDAD O CAUSALIDAD? cualquiera de las dos es increíblemente fascinante.
La idea del destino me resulta contradictoriamente asfixiante y al mismo tiempo me libera de responsabilidad. Pero si fuera así, como podría escapar cuando quiera ser dueña de mi misma?
Podría repentinamente dejarlo todo y cambiar el rumbo, hacer lo contrario a lo que el mundo espera de mi... pero acaso no podría estar eso escrito también?
La tesis de la casualidad me da la sensación de cuerda floja, depender del capricho de la suerte me resulta menos creíble todavía. Buena suerte o mala suerte. Cada vez que tuve mala suerte, no fue mas que una clase de jugada a largo plazo, y todo se acomodó de modo que eso que parecía un dilema se convertía en la pieza fundamental de una buena pasada.
En fin, después de todo no tengo las respuestas pero hay algo es cierto, el futuro es por una u otra cuestión la consecuencia directa o indirecta inevitable e impredecible de este presente que vivimos aquí, ahora y cada pieza que movamos hoy lo condiciona casual o causalmente.
Que estabas por hacer??